Prohibido no tocar
El lunes debería ser el comienzo de clases en la mayoría de las escuelas de Capital y Provincia pero parece que lamentablemente esto no va a ser así por problemas donde los chicos no tienen voz ni voto a pesar de ser los principales perjudicados. Así como la sociedad en su conjunto, toda vez que el nivel cultural y social de los argentinos, va siendo minado en forma persistente y sutil. Ya se sabe que a los ineptos se les facilita mucho gobernar a un pueblo ignorante antes que a uno culto.
En fin, que los padres tenemos recursos a mano, a pesar de todo, y tenemos que aprovecharlos. Les cuento un paseo que hicimos con Marcos a principios de Febrero que fue muy educativo. La idea era visitar distintas Exposiciones del Centro Cultural Recoleta, entre ellas las de Ciruelo.
Sí. Se nos "hizo la luz" y estuvimos internados por más de tres horas y media en la muestra que organiza el Museo bajo el nombre de "Prohibido no tocar" hasta que nos echaron. Salimos agotados.
La idea de la muestra es que grandes y chicos experimentemos diversos fenómenos en el área de las ciencias para "aprender jugando". El tiempo se esfumó compartiendo el placer de asombrarnos, al punto que nos quedó un piso sin visitar.
Es que cada tanto un encargado del Museo nos invitaba a concurrir al Auditorio donde nos daban una especie de "clase especial" sobre una determinada área de interés. La primera que recibimos fue de Biología dada por Martín, con ganas y ternura.
La segunda que a Marcos lo volvió loco fue la de química. La dió también una chica amorosa que se quedó paciente al final explicándole con detalle a Marcos parte de los experimentos y contestando todo tipo de preguntas.
Intentaré dar un pantallazo sobre algunas de las salas. Una de las que más nos atrapó fue la que antecede justamente al Auditorio, donde no dejamos experimento por probar. Dedicada a música, ondas y sonidos.
Desde conocer el rango de audición de cada persona hasta una forma simple de comunicarse a la distancia sin cables, pasando por el funcionamiento físico de muchos de los principales instrumentos musicales.
"NO me mates matemática" es la sala dedicada a esa ciencia. Marcos se entusiasmó muchísimo, y se quedó un largo rato analizando la representación física del teorema de Pitágoras (que no hay caso, yo no terminé de entender, o la explicación era muy larga para mi en ese momento) aunque en el colegio lo sabía usar, aplicando la fórmula a ciegas.
Por suerte en esta misma sala estaban experimentos relacionados con eclipses, imanes, estadísticas y otras yerbas donde me posicioné un poquito mejor frente a mi hijo. Y ni qué hablar de la Sala de las fuerzas de la naturaleza donde recuperé el terreno perdido antes, explicando huracanes, tormentas, rayos, etc.. :-)
"La mesa está servida" es el sitio dedicado a estudiar los alimentos, le sigue una sala dedicada al arte, particularmente gráfico, y un poco más allá la relacionada con los experimentos que tienen por objeto la corriente eléctrica. Esa a mi me encantó. Lo mismo que la que estudia la descomposición de la luz, las lentes, los espejos, los prismas, etc.
Armar circuitos eléctricos, jugar con cables, colores, proyecciones, espejos que ensanchan o adelgazan, rayos láser, fibras ópticas, la oferta es tan grande que no hay forma de no encontrar algo que nos atrape.
En cada experimento un cartel explicativo da sentido a lo que se ve y se hace, de manera que tanto los chicos como los adultos entendemos -o intentamos- por qué y cómo suceden ciertos fenómenos.
Por eso, vayamos "contra la corriente" y pongamos nosotros un poco de cultura frente al deseo chato de quienes nos gobiernan y arrimemos a nuestros hijos, sobrinos y nietos a las aguas donde los conocimientos descansan a la espera de los sedientos. Mientros ellos "discuten" y acuerdan por delante o por detrás por cuánto tiempo más seguirán perjudicando a la educación formal.
Una critica para terminar tiene que ver con el precio del estacionamiento subterráneo, que a pesar de ser una explotación de la Ciudad de Buenos Aires no tiene previsto un descuento contra la presentación del pago de la entrada correspondiente a quienes asistieron a alguna de las muestras del museo. Me gustaría que los funcionarios contemplen esa situación, ¿tienen idea de lo que me salió dejar el auto unas cuatro horas? No todos vivimos en Recoleta. Yo vengo desde la provincia...
*** Dejo la info: Centro Cultural Recoleta - Junin 1930, ciudad de Buenos Aires. La muestra es paga, no recuerdo el arancel, pero si dejo el teléfono para consultar: 011) 4807 3260 - E-mail: info@mpc.org.ar -URL: http://www.mpc.org.ar
Etiquetas: Buenos Aires, educación, Museo, niños
posted by Abril Lech @ 1:29 p. m.
7 comments
